¿Cómo mantenernos competitivos cuando el cambio es discontinuo y el futuro es cada vez menos una extrapolación del pasado?
Para afrontar los nuevos desafíos las organizaciones han de buscar un nuevo balance entre la jerarquía como garante de predictibilidad y control y la redarquía como motor de la innovación y el crecimiento.
Una organización dos estructuras
Explotando las viejas certezas explorando las nuevas realidades
En las organizaciones duales la redarquía como estructura complementaria a la jerarquía hace posibles nuevos marcos de contribución para las personas, no necesariamente ligados a ocupar posiciones de poder y autoridad en el organigrama, sino a la credibilidad y valor añadido de las personas.


El camino hacia la Organización Dual
Marco de Transformación
Si queremos realmente acelerar la estrategia y la necesaria transformación digital debemos dotar a nuestras empresas de la capacidad de ejecutar el día a día y a la vez explorar las nuevas oportunidades y sortear las amenazas. En la organización dual, la jerarquía tradicional, conduce el negocio cotidiano de los negocios, mientras que la redarquía, se centra en las oportunidades y demandas del futuro, y actúa como una red ágil de dinamizadores de los cambios.
Así como la jerarquía es la estructura natural para la ejecución fiable de los procesos de negocio y para la consecución de los resultados, la redarquía es la estructura natural para la iniciativa, la creatividad y la innovación,